Seguimos esperando noticias sobre la construcción de la nueva Charlie Rivel. Ese es el resumen de la situación a fecha marzo de 2021.
Algunos/as recordareis que el año pasado, empezando por estas fechas, vivimos una situación complicada para las familias, ya que además del comienzo de la pandemia de la Covid-19, tuvimos que afrontar la incertidumbre de cuál sería la ubicación de nuestra escuela para el curso 2020-2021.
Tanto para los que seguisteis paso a paso todas las noticias sobre el asunto, como para los que no tienen claro qué ocurre, vamos a intentar ponernos en situación sobre este tema.
El edificio de nuestra escuela sufre desde hace años de unas patologías estructurales, que en ciertos momentos se han hecho visibles en forma de grietas. Esto hizo plantearse a las administraciones la viabilidad de continuar usando las instalaciones; los técnicos municipales realizaron un estudio en el que determinaron inconvenientes relacionados con la cimentación del inmueble.
En 2008-2009, el Ayuntamiento de Coslada decidió que la nueva Charlie Rivel se construyera en El Barrio del Puerto, adjudicando una parcela, que se encuentra entre el CPEE Guadarrama y la Cruz Roja en C/ Océano Pacífico, siendo aprobado el proyecto e incluido en el Plan Regional de Inversiones (PRISMA) 2008-2011 de la Comunidad de Madrid.
Desde entonces, estamos a la espera de la construcción de una nueva escuela, que por diversos problemas administrativos, todavía no ha comenzado, aun teniendo la parcela adjudicada, el proyecto aprobado y licitado en el año 2017.
De hecho, en julio de 2016, en reunión mantenida con la por entonces presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, el Ayuntamiento de Coslada consiguió su compromiso reflejado en nota de prensa, en el que se aseguraba que “la escuela infantil Charlie Rivel será una realidad para el curso 2017-2018”.
En el pleno ordinario de diciembre de 2016 del Ayuntamiento de Coslada, todos los grupos políticos municipales aprobaron una moción para instar a la Comunidad de Madrid a dar cumplimiento a los proyectos que restaban del Plan PRISMA, entre ellos, la nueva Escuela Infantil Charlie Rivel.
En octubre de 2017 el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid aprobó la celebración del contrato de obras denominado “Escuela de Educación Infantil en el barrio del Puerto, en el municipio de Coslada”, actuación incluida en prisma 2008-2011 prorrogado, tramitado por procedimiento abierto mediante criterio único el precio, y se autoriza un gasto plurianual por importe de 1.479.244,97 euros, con un plazo de ejecución de 9 meses. Las obras salieron a licitación ((expediente A/OBR-005530/2017 (15-B/17)) en ese momento.
Ese mismo mes de octubre de 2017 se publicó en el BOCM la resolución del anuncio de la licitación del contrato, que puede consultarse en este enlace:
La Comunidad de Madrid, a quien le corresponde la construcción de instalaciones educativas, señaló en sendas notas de prensa de febrero y mayo de 2019 que “el Gobierno regional ha retomado en esta legislatura las 305 actuaciones, aún pendientes, relativas al Plan PRISMA 2008-2011, por un importe de 79,5 millones de euros. El 90% de estas actuaciones se encuentran ya finalizadas o en avanzado estado de ejecución, con lo que podemos decir que este Plan está a punto de concluir, gracias a la gestión de este Gobierno regional”. Exactamente las mismas palabras en ambos comunicados:
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El año pasado, a tan solo un día del inicio del periodo de admisión de alumnos, las familias de la escuela conocimos la decisión acordada entre el Ayuntamiento de Coslada y la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid, de trasladar nuestra escuela para el curso 2020-2021 al edificio de la Escuela Oficial de Idiomas de Coslada, que se encuentra a algo más de 2 kilómetros y cuyas instalaciones no están adaptadas para albergar una escuela infantil, de forma temporal hasta la construcción de la nueva escuela por parte de la Comunidad de Madrid
Con esta medida, el centro de Coslada quedaba sin escuela infantil pública, por un tiempo indeterminado, con el perjuicio ocasionado a multitud de familias, sumando este problema a la incertidumbre del inicio de curso debido a las medidas que se pudieran adoptar por el covid-19.
En ese momento, desde la AMPA quisimos dar
visibilidad a este problema, informando en redes
sociales, enviando por registro
electrónico nuestra queja a las administraciones públicas y creando una petición de firmas (http://chng.it/jDDsKWK9), en la que se
consiguieron 818 firmas.
Solicitamos que se reconsiderara y revirtiera la decisión del traslado y se encontrara una alternativa viable dentro de la zona del casco de Coslada, ya que se complicaba la conciliación laboral-familiar, se dependía de transporte público para llegar o de vehículo privado, el edificio elegido no era apropiado para escuela infantil, se perdía cocina propia y patio grande y se hacía muy difícil la elección de otra escuela infantil por parte de las familias.
Tras estas acciones mantuvimos reuniones
telefónicas con la Comunidad de Madrid y presenciales, junto a la Dirección de
la escuela y la FAMPA, con el Ayuntamiento de Coslada, representado por
técnicos del mismo, el concejal de Educación y el propio alcalde.
Finalmente, el Ayuntamiento decidió realizar una
inversión para acometer obras de rehabilitación en nuestra escuela
actual, que garantizara la seguridad para el curso 2020-2021, y de
esta forma evitar el traslado temporal que se había propuesto, pero con la
idea de poder utilizar el siguiente curso 2021/2022 la nueva escuela, proyectada
hace una década y cuya construcción depende de la Comunidad de Madrid.
Tanto desde el Ayuntamiento de Coslada, como desde la Dirección de Área Territorial Madrid-Este de la Comunidad de Madrid, se nos transmitió la intención de la Comunidad de Madrid de comenzar las obras del nuevo centro este mismo año 2020, para poder contar con las instalaciones el siguiente curso.
Por este motivo, y como parte de nuestro plan de acción para defender la existencia de escuelas infantiles públicas en el barrio, solicitamos a la Comunidad de Madrid el compromiso de la construcción de la nueva escuela Charlie Rivel, comenzando las obras lo antes posible dentro de este año 2020; se enviaron escritos por registro y se abrió una nueva petición de firmas para pedir la construcción de la escuela, que aún sigue activa:
https://www.change.org/construccionNuevaEIMCharlieRivel
Además, el 9 de junio de 2020, en el pleno ordinario del Ayuntamiento de Coslada, todos los grupos políticos votaron a favor la moción para instar a la Comunidad de Madrid a realizar la ejecución de las obras de construcción de la escuela. Es más, en una reunión de la FAMPA Coslada con la Dirección del Área Territorial (DAT) de Madrid-Este celebrada el 27 de julio de 2020 en la que estuvieron presentes Jorge de la Peña, director de la DAT Madrid Este de Educación, y Paloma Villalobos, jefa de servicio de la unidad de programas educativos de la DAT, aseguraron una vez más que las obras que dependen de la Consejería de Vivienda y Administración Local iban a comenzar este año.
Varios meses después, el solar donde supuestamente se va a construir la nueva escuela, sigue siendo un solar.
En noviembre de 2020 se nos informó que el Ayuntamiento de Coslada había mantenido una reunión con la Consejería de Administración Local de la Comunidad de Madrid, de la que hemos tenido más detalle en este mismo mes de marzo, teniendo como consecuencia principal que el curso que viene no estaremos en el edificio actual, como ya os hemos comentado. De todo esto hablaremos más adelante, en cuanto tengamos más información al respecto.
Sobre el inicio de las obras: sin novedad, por las últimas noticias que teníamos allá por el comienzo del curso 2020-2021, parece bloqueado por la negativa de los interventores de la Comunidad de Madrid a conceder el proyecto de construcción de la escuela a la empresa pública Tragsa, que era la que iba a encargarse de desbloquear esta situación en el año 2020.
Se acerca la fecha de la admisión de alumnos y volvemos a encontrarnos en una situación similar al curso pasado y sin vistas de que se construya la nueva escuela.
Hemos visto en los últimos meses, como cuando existe una verdadera intención, las administraciones hacen un esfuerzo y agilizan la burocracia, para que en poco tiempo puedan levantarse ciertas construcciones, como puede ser un hospital.
¿Por qué no una escuela infantil?